Omar Khayyam es un sabio, matemático, astrónomo y poeta. En este artículo, hemos recopilado las mejores citas de Khayyam en forma poética: rubaiyat sobre la vida, el amor y el vino. Omar Khayyam se dedicó al estudio de la vida misma. Hizo mucho trabajo científico en áreas como matemáticas, astronomía, medicina, filosofía, pero el mundo es mejor recordado como poeta, autor de cuartetas rubaiyat. Desafortunadamente, durante la vida de Khayyam, su mente extraordinaria no fue apreciada. Fue recordado solo en el siglo XIX, cuando le llegó la fama mundial. En su rubai, Khayyam plantea preguntas sobre el significado de la vida, la castidad, la felicidad, el amor, la amistad y, por supuesto, sobre su bebida favorita: el vino. Acerca de la vida - uno - No envidies al que es fuerte y rico. El amanecer siempre es seguido por la puesta del sol. Con esta vida, corta, igual a un suspiro, trátala como si te la dieran en alquiler. — 2 — Quien es golpeado por la vida, logrará más. Un pud de sal que ha comido aprecia más la miel. Quien derrama lágrimas, se ríe sinceramente. ¡Quien murió, sabe que vive! — 3 — "El infierno y el cielo están en el cielo", dicen los fanáticos. Mirándome a mí mismo, me convencí de la mentira: el infierno y el cielo no son círculos en el palacio del universo, el infierno y el cielo son dos mitades del alma. - 4 - Todo se compra y se vende, y la vida francamente se ríe de nosotros. Estamos indignados, estamos indignados, pero somos vendidos y comprados. - 5 - No te lamentes, mortal, por las pérdidas de ayer, no midas las acciones de hoy con la medida de mañana. No creas en el pasado ni en el futuro. Cree en el minuto actual: ¡sé feliz ahora! Sobre el amor — 6 — Sí, en una mujer, como en un libro, hay sabiduría. Sólo los letrados pueden comprender su gran significado. Y no te enojes con el libro, si, ignorante, no lograste leerlo. — 7 — En una mano hay flores, en la otra, un vaso permanente, festeja con tu amada, olvidándote de todo el Universo, hasta que un tornado de muerte te arranque repentinamente, como pétalos de rosa, la camisa de la vida mortal. - ocho - Quién es feo, quién es guapo, no conoce la pasión. Un loco enamorado acepta irse al infierno. A los enamorados no les importa qué ponerse, qué poner en el suelo, qué poner debajo de la cabeza. - nueve - Cuyo corazón no arde de amor apasionado por el amado, sin consuelo, arrastra su insulsa vejez. Los días pasados ​​sin las alegrías del amor, los considero una carga innecesaria y odiosa. - diez - Amar y ser amado es felicidad. Proteges del simple mal tiempo. Y tomando las riendas del amor juntos con ansias en tus manos, nunca las sueltes, aun viviendo separados... Sobre el vino - once - Dicen que los borrachos irán al infierno. ¡Todas las tonterías! Si los bebedores fueran enviados al infierno, y todas las amantes de las mujeres después de ellos, vacíos como una palma, tu Jardín del Edén se convertiría. - 12 - ¡Un corazón! Que los astutos, conspirando al mismo tiempo, condenen el vino, dicen, es nocivo. Si quieres lavar tu alma y tu cuerpo, escucha poesía con más frecuencia mientras bebes vino. - trece - Un jardín en flor, una novia y una copa de vino: este es mi paraíso. No quiero terminar en otra cosa. ¡Sí, nadie ha visto el paraíso celestial! Así que, por el momento, consolémonos con las cosas terrenales. - catorce - Pero el vino enseña la misma sabiduría, en cada copa hay una receta de vida: “¡Cierra los labios y verás el fondo! - quince - El vino está prohibido, pero hay cuatro peros: según quién, con quién, cuándo y con moderación se bebe vino. Sujeto a estas cuatro condiciones, el vino está permitido a todas las personas cuerdas.